EPOC con desigualdad femenina
Así lo indica una revisión metodológica de los estudios IBERPOC de 1997, EPISCAN de 2007 y EPISCAN II del año 2017, de los que se seleccionaron 14.204 individuos (hombres y mujeres), pero ahora analizados con un perfil sociodemográfico adaptado a la estrategia GOLD.
En este sentido, el nuevo escrutinio se valoró atendiendo el límite inferior de la normalidad (LIN) de las espirometrías en los pacientes diagnosticados con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y en base al cociente fijo FEV1/FVC menor de 0,7.
La prevalencia de la epoc en España, antes de la revisión metodológica, fue del 9,1 % en hombres y mujeres de 40 a 69 años de edad (IBERPOC); y de 10,2 % entre personas de 40 y 80 años en EPISCAN (15,1 % en hombres por 5,7 % en mujeres).
El estudio EPISCAN II había reflejado que la prevalencia en personas mayores de 40 años era del 11,8 % (14,6 % en varones y 9,4 % en mujeres).
En cuanto al infradiagnóstico de la EPOC, continúa en números altísimos… prácticamente en valores estables en los tres estudios de base: 77,6 % (IBERPOC), 78,4 % (EPISCAN) y 78,2 % (EPISCAN II).
Antes de la revisión metodológica de estos valores, el infradiagnóstico en España se situaba en 78,2 %, 73 % y 74,7 % (hombres un 70,4 % y mujeres un 80,6 %), respectivamente.
Los resultados del estudio “Tendencias de la EPOC en España: cambios entre las encuestas transversales realizadas en 1997, 2007 y 2017“, liderado por la Dra. Elena García Castillo, se han publicado en marzo de 2023 en la revista Archivos de Bronconeumología.
Un 45 % de l@s pacientes que se analizaron en esta revisión metodológica fueron diagnosticados en fases moderadas y un 5 % en fases graves. El diagnóstico de su EPOC, por tanto, fue tardío. Casos de epoc muy, muy evolucionados, que ingresan y reingresan en los centros hospitalarios.
La EPOC, con una alta prevalencia a nivel mundial, es un problema de salud de primera magnitud en su doble aspecto individual y poblacional, en gran parte debido a su elevado impacto socioeconómico”, destaca la neumóloga del Hospital Universitario de La Princesa de Madrid.
Pero no se quedan ahí los datos apabullantes, ya que la EPOC en España ha pasado de ser la cuarta causa de mortalidad en 1990, después de las cadiopatías isquémicas, las enfermedades vasculares cerebrales y el cáncer de pulmón, a figurar en la tercera posición del ranquin en 2017.
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica causa la muerte de unas 29.000 personas cada año (17.333 varones y 11.433 mujeres).
“Y no solamente l@s pacientes se mueren más por la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, sino que sabemos que la EPOC les roba años y calidad de vida”, subraya la médica neumóloga.
Cabe destacar, como dato simbólico del estudio EPISCAN II, que las chicas superan a los chicos a la hora de fumar (9 % frente a 8 %); y en la horquilla de 10 a15 años de edad les sobrepasan en dos puntos (4,5 % por 2,5 %).
Además, el inicio del hábito tabáquico en España se ha situado en la media de 13,9 años, en plena adolescencia de chicas y chicos, un periodo fundamental del desarrollo psicofisiológico.

Claves de la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica
La EPOC se caracteriza esencialmente por el deterioro progresivo de los pulmones (bronquios, bronquiolos y alvéolos) y se manifiesta clínicamente por ahogamiento, disnea o dificultad para respirar, acompañado, a menudo, de tos, con o sin expectoración.
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica está ligada fundamentalmente al hábito tabáquico. El humo contiene alrededor de 2.000 sustancias químicas, de las que más de 600 son tóxicas… y 70 son carcinógenos, como el alquitrán, el amoniaco, el benceno o el arsénico.
Como detonantes de la EPOC debemos sumar otros factores de riesgo: los ambientales, como la contaminación atmoférica o la combustión de la biomasa, la exposición a químicos en el ámbito laboral y causas genéticas, como la deficiencia de alfa-1 antitripsina.
También, el desarrollo pulmonar anómalo vinculado a la prematuridad del bebé y las infecciones respiratorias en la infancia, como el síndrome del virus respiratorio sincitial.
En el caso de las mujeres, numerosos estudios han evaluado la existencia de una mayor susceptibilidad a los efectos nocivos del tabaco, situación que vendría determinada por tres factores: anatómicos, genéticos y hormonales.
Anatómicos. Sus vías aéreas son de menor tamaño.
Genéticos. Las mujeres desarrollan la patología en modo más severo, al igual que las personas con antecedentes de madres fumadoras, las mujeres afroamericanas o las que hayan padecido enfermedades respiratorias en la infancia.
Hormonales. Los estrógenos en las mujeres activan la enzima citocromo P450, lo que va a metabolizar diferentes componentes del cigarrillo, dando lugar a diferentes sustancias carcinogénicas y tóxicas.
Clínicamente, las mujeres, aunque expectoren y tosan menos que los hombres, tienen un mayor grado de disnea para una igual obstrucción al flujo aéreo.
A la vez, conviene destacar que el 50% de la población española es sedentaria y no realiza deporte alguno o ejercicio físico diario recomendado.

Una revisión epidemiológica de la EPOC española
El estudio IBERPOC de 1997 se realizó bajo criterios LCFA (antiguos ERS) en base a los datos facilitados por siete ciudades españolas de una muestra espirométrica total de 4.035 pacientes y edades comprendidas entre los 40 y los 69 años.
La definición de EPOC se predijo con el cociente posbroncodilatador FEV1/FVC<88 % en hombres y <89 % en mujeres.
En EPISCAN 2007, fueron diez las ciudades estudiadas y una muestra de personas (3.802) con edades comprendidas entre los 40-80 años. El cociente posbroncodilatador fue FEV1/FVC<0,7.
EPISCAN II se realizó en diecinueve ciudades y con 9.433 personas mayores de 40 años. Los criterios se ajustaron a las indicaciones de SEPAR en el 2013 y el cociente posbroncodilatador se efectuó con FEV1/FVC<0,7 y FEV1/FVC<LIN.
En la revisión metodológica de estos tres estudios, el objetivo se ha centrado en evaluar los cambios en la prevalencia de la EPOC en dos decenios, de 1997 a 2017.
Y se introdujeron algunos cambios, siendo los de mayor relevancia: estrategia GOLD, personas entre 40 y 69 años de edad, con espirometrías válidas, y cociente fijo FEV1/FVC menor de 0,7 o bajo el criterio del límite inferior de la normalidad (LIN). El análisis se centró en 14.204 individuos, hombres y mujeres.

“Es muy llamativo -señala la Dra. García Castillo-, que la prevalencia obtenida ahora en IBERPOC es de un 21,6 %; mientras que en 2017, en EPISCAN II, se sitúa en un 8,8 %, lo que supone un 59,2 % de descenso en la prevalencia”.
“En cambio, aumenta un 1,1 %, pasando de 7,7 % a 8,8 % desde 2007 (EPISCAN) a 2017. No es una diferencia relevante, pero sí refuerza una tendencia de dato sostenido en el tiempo”, explica.

“Si este análisis se realiza mediante el criterio del límite inferior de la normalidad (LIN), vemos que estas cifras de prevalencia son más bajas, pero seguimos obteniendo casi la misma tendencia”, dice.
“Hay un descenso en la prevalencia de un 67,3 % (15,6 % a un 5,1 %) entre 1997-2017 y un aumento leve 0,6 % (4,5 % y 5,1 %) entre 2007 y 2017”, detalla.

“Tanto en los tres estudios históricos sobre la EPOC en España como en nuestra revisión metodológica de los mismos (elaborada en 2002 y publicada en 2023) se pone de mamifiesto, como dato de suma importancia, que un gran número de las personas incluidas padecían algún síntoma respiratorio”, señala.
“Al menos un tercio de ellos y ellas sufrían sibilancias (pitidos cuando el aire se desplaza por vías maltrechas), pero un 60 % de los sujetos registra alguna sintomatología respiratoria, como tos, expectoración, disnea -falta de aire-, además de la propia sibilancia”, relaciona.
Por añadidura, el estudio interpretó los resultados teniendo muy en cuenta las enfermedades respiratorias previas de estas personas: asma, EPOC, bronquitis crónica y enfisema.
Conclusiones de la revisión metodológica de los estudios sobre la enfermedad pulmonar obstructiva crónica IBERPOC, EPISCAN y EPISCAN II:
La prevalencia de la EPOC en España, entre 1997 y 2017 en los sujetos estudiados de 40 a 69 años, se ha reducido en un 59,2 %. Pero se han mantenido muy estable desde 2007 a 2017.
Existen diferencias de prevalencia en las edades extremas según el uso del criterio espirométrico del LIN o del coeficiente fijo FEV1/FVC.
El infradiagnóstico de la enfermedad en las últimas dos décadas ha ido en aumento con una clara tendencia al alza en las mujeres, un dato muy preocupante.
El porcentaje de fumadores activos en los hombres ha descendido en las últimas décadas, pero en las mujeres fumadoras ha aumentado considerablemente.
Dra. Elena García Castillo, neumóloga del Hospital Universitario de La Princesa y coordinadora del Grupo EPOC de NeumoMadrid
Este videoblog se ha elaborado a partir de la intervención de la Dra. García Castillo en la mesa de debate “La EPOC se rejuvenece y tiene, cada vez más, nombre de mujer” del programa científico “Visionarios, Innovación y Futuro en Enfermedades Respiratorias”; un encuentro profesional que se desarrolló el pasado 6 de octubre de 2023 en el salón de actos del Hospital Universitario de La Princesa de Madrid.