Si eres una de esas personas a las que les encanta correr, en corriendo, correr, jogging o cualquier otra disciplina, Es probable que en algún momento te hayas hecho la pregunta ¿cómo debo correr para no lesionarme? A continuación, vamos a dar varias pinceladas para responder a esta pregunta que puede ser la diferencia entre el éxito y el fracaso en el deporte. Son Importante consejo que todo aquel que quiera tener esta afición a medio o largo plazo debe tener en cuenta.¿Cómo debo correr? Si te has hecho esta pregunta, estás en el camino correcto. Mucha gente se calza unas zapatillas y corre por donde quiere hasta cansarse, ignorando los casos y estudios que advierten de los peligros potenciales de correr. Aunque no lo parezca, correr varias veces a la semana durante mucho tiempo también conlleva sus riesgos.Correr sin lesionarse es uno de los mayores anhelos de cualquier deportista. Por eso, los siguientes consejos te ayudarán a practicar tu deporte favorito minimizando los riesgos. Asesórate con la información adecuada Lo primero es saber que no te estás perjudicando por un problema estructural. Es recomendable disponer de pruebas biométricas o al menos un estudio de la pisada. De esta forma, sabrás que no estás dañando tus articulaciones con cada paso que das. Es posible que necesite traer plantillas o alguna ayuda similar. Y es mejor saber esto antes de empezar. Hay estudios que demuestran que casi el 50% de las personas tienden a pisar más con la parte exterior o interior del pie que de forma neutra. Conociendo tu cuerpo Como en tantos otros casos, Es vital conocer tu condición física y trabajar teniéndola en cuenta. Es decir, se debe empezar a correr tramos cortos intercalados con periodos cortos de caminata, y poco a poco ir aumentando la intensidad. Nadie pasa del sedentarismo a correr una maratón en una semana. Es un proceso y tienes que seguirlo sin saltarte pasos para mantener tu cuerpo sano. Con el equipo adecuado Cuando ya tienes tus plantillas y sabes cuánto tiempo quieres salir a correr, lo siguiente es elegir los zapatos adecuadosEl tipo de zapatillas que necesitas dependerá de varios factores, entre ellos: la forma de tu pie, la frecuencia con la que vas a correr, el terreno que vas a pisar… Si te has hecho un análisis de la pisada hecho, es buena idea pedir al podólogo recomendaciones al respecto. La variedad es el gusto. Esta respuesta a la pregunta ‘¿cómo debo correr?’ tiene dos partes. Por un lado, para evitar lesiones debes correr sobre superficies blandas, o al menos no siempre sobre superficies duras. Si sales a correr dos veces por semana no es tan importante. Pero si son tres, cuatro o más veces, conviene que al menos una de ellas no sea sobre asfalto. Debes encontrar un parque y correr sobre césped, una playa o una pista de atletismo. Esto ayudará a minimizar el impacto que tiene correr en las rodillas.En segundo lugar, si vas a correr cuatro o más veces por semana, debes intercalar sesiones con otros deportes de vez en cuando.. Ya sea en los días en que no corres, o reemplazas una sesión de corriendo para otro tipo de ejercicio. Puede ser ejercicio aeróbico, alguna clase en el gimnasio, natación, ciclismo o simplemente algo para evitar aplicar constantemente la misma presión sobre las mismas estructuras. Calentar y estirar El calentamiento es fundamental para preparar las estructuras para el próximo esfuerzo. propina, No debes olvidar la importancia del calentamiento y los estiramientos. Antes de empezar es bueno preparar el cuerpo y tener los músculos oxigenados y listos. Y los estiramientos posteriores, para iniciar y acelerar la relajación del cuerpo y su recuperación. Correr tiene sus riesgos Sí, correr también tiene riesgos, sobre todo si se corre tres o más veces por semana. Afortunadamente para tus tobillos, rodillas y caderas, estás leyendo este artículo. Si sigue los consejos de este artículo, habrá hecho mucho para limitar el daño o el desgaste que sufrirá su cuerpo.. Esto te permitirá dedicarte a tu deporte favorito por más tiempo y no perder calidad de vida. De lo contrario, correr es una excelente manera de mantenerte activo y saludable. Ayuda a la estabilidad y postura corporal, al sistema circulatorio, nervioso, respiratorio y digestivo, y tiene muchos otros beneficios que no se ven a simple vista, pero que tu cuerpo agradecerá. Te puede interesar…
Correr con frecuencia conlleva ciertos riesgos. En este artículo te explicamos cómo minimizarlos.