Los resultados en salud no dependen únicamente de factores biológicos y genéticos. De hecho, los factores sociales son los más determinantes: estilo de vida en un 43%, sistema de salud en un 11% y condiciones ambientales en un 19%.
Así, la empresa biofarmacéutica msd en colaboración con el Fundación Gaspar Casalha desarrollado diferentes iniciativas para hacer frente a las desigualdades provocadas por los diferentes factores sociales en salud.
Entre ellos, ha organizado un seminario con el objetivo de visibilizar estos factores para desarrollar un acceso equitativo a la salud.
Bueno, la genética no es el único determinante que determina el estado de salud.
Otros factores como la situación socioeconómica, el nivel de educación, el lugar de residencia y vivienda, el ambiente de trabajo, la red de relaciones sociales y familiares, así como la capacidad de acceder a los servicios de salud, también son determinantes.
Todos estos elementos inciden en la existencia de desigualdades que repercuten en la salud y la esperanza de vida de las personas.
Influencia de los determinantes sociales en la salud española
Señalan que los resultados de salud dependen de una 27% del factores biologicos y geneticosen un 43% del estilos de vidaen un once% de sistema sanitario y en un 19% del condiciones ambientalesasí que tres de cada cuatro son factores sociales.
Entre estos, se destacan los siguientes:
- los género.
- los Lugar de residencia.
- los acceso a la salud.
- los nivel educativo y/o situación económica.
- Otros: etnia, diversidad sexual, estatus migratorio…
Género
El género también influye en la esperanza de vida media. En el caso de las mujeres, la media es 82,9 añosmientras que la de los hombres es 77.3. Las mujeres viven más tiempo, pero lo hacen con una mayor carga de enfermedad.
Lugar de residencia
Geográficamente, en las comunidades autónomas con mayor PIB per cápita, como Madrid, País Vasco, Cataluña… situadas al norte, la esperanza de vida es mayor.
En otros situados al sur, como Melilla, la media se puede reducir hasta en cuatro años.
acceso a la salud
En el zonas rurales el acceso a la salud está determinado por la desigualdad.
La falta de profesionales sanitarios en estas zonas y el difícil acceso a los centros de atención primaria y hospitalaria hacen que sus parejas tengan mayor riesgo de padecer enfermedades crónicas y menor acceso a pruebas diagnósticas preventivas.
Además, la población rural tiene peor salud visual y las mujeres de esta zona saben menos sobre la vacuna contra el Virus del Papiloma Humano que las que viven en la ciudad.
La situación económica también importa
Según el informe “Por una salud indeterminada. Una hoja de ruta hacia la equidad”realizado por ambas instituciones, las personas que tienen menor acceso a la educación, menor ocupación laboral o menores ingresos, tienden a sufrir más problemas de salud y tienen más probabilidades de morir a edades más tempranas.
Dependiendo de situación económicala esperanza de vida también varía.
Un estudio realizado por el Grupo de Epidemiología y Salud Pública (CIBERESP) del Centro de Investigaciones Biomédicas en Redpublicado en la revista Naturalezarefleja que las personas con menos recursos viven entre tres y cuatro años menos que las que tienen un mayor poder adquisitivo.
Un mayor ingreso proporciona una mejor calidad de vida, un mayor nivel de capacitación, así como servicios de salud más integrales.
En el caso de la precariedad laboral y habitacional, existe una asociación positiva entre la precariedad laboral y la mala salud mental, que se manifiesta especialmente en las mujeres.
Iniciativas y retos
El desafío propuesto por las organizaciones es comenzar a trabajar por una salud específica para que ninguno de estos determinantes provoque falta de equidad en salud.
En la misma línea, proponen actuar con un enfoque multisectorial en materia de capacitación y sensibilización, incremento del registro de datos y evidencias, y aplicación de políticas efectivas.
Entre las iniciativas llevadas a cabo, destaca MSD para madres (una campaña para reducir las muertes relacionadas con el embarazo a escala mundial) y una Programa de Donación MECTIZAN (para la eliminación de la oncocercosis o oncocercosis en Colombia, Ecuador, Guatemala y México), además de diferentes ensayos clínicos.