La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha presentado un plan estratégico global con el fin de combatir los arbovirus (virus transmitidos por artrópodos) causantes de enfermedades como el dengue, el zika, el chikungunya o la fiebre amarilla, presentes en las zonas donde habita. la mitad de la humanidad.
Las picaduras de mosquitos como las del “aedes aegypti” transmiten, entre otras enfermedades, el dengue. EFE/Gustavo Amador
La nueva estrategia, presentada por la epidemióloga de la OMS Diana Rojas, propone, entre otras medidas, un mayor control de las comunidades de mosquitos Aedes, principales transmisores de estas enfermedades, así como sistemas de detección temprana de arbovirus y vacunación en zonas de alto riesgo.
Alrededor de 3.900 millones de personas viven en regiones donde estos arbovirus están presentes, con la incidencia de la dengueque cada año afecta a unos 390 millones de personas y está incluida por la OMS en su lista de las diez principales amenazas para la salud mundial.
Sus síntomas incluyen fiebre alta y fuertes dolores musculares y articulares, aunque algunos pacientes también sufren hemorragias subcutáneas o pérdidas capilares, y hasta la fecha no existen tratamientos específicos para la enfermedad.
El zika se hizo especialmente conocido por el brote en Brasil que causó alarma internacional en 2016, aunque se ha detectado en otros 80 países, mientras que el chikungunya, que suele provocar fuertes dolores en las articulaciones (y artritis en los casos más agudos), está presente en 115. los paises.
OMS: el 99% de la humanidad respira aire insalubre
El 99 % de la población mundial respira aire con niveles de calidad por debajo de los niveles mínimos fijados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), advirtió hoy este organismo, que abogó por la reducción del consumo de combustibles fósiles entre otras medidas para mejorar este atroz índice.
El porcentaje, que supondría aproximadamente 7.700 millones de personas en cifras absolutas, se ha calculado analizando datos de estaciones de control de calidad del aire en 6.000 ciudades de 117 países, y comparándolos con los estándares de aire limpio fijados el año pasado. la OMS, más estrictas que las que existían antes.
El informe muestra, por ejemplo, que el 99% de las ciudades de países de ingresos bajos y medios y el 17% de las naciones más ricas no cumplen con los estándares en materia suspendida, ni en el caso de PM10 (10 micras de diámetro) ni en el más dañino PM2.5 (con un diámetro de menos de 2,5 micras).
El año pasado la OMS fijó su recomendación en el caso de las partículas PM2,5 en menos de 15 microgramos por metro cúbico de aire (antes eran 25), una cifra que, por ejemplo, multiplica por 30 la ciudad india de Ahmedabad, la cual muestra peores cifras en este caso.
De las 20 peores mediciones de partículas PM2.5 según el estudio, 18 se encuentran en lugares de la India, dos en la vecina Bangladesh y una en China.

Las partículas PM2.5 son las más dañinas para la salud, ya que por su pequeño tamaño pueden llegar a los pulmones y acceder al flujo sanguíneo, por lo que pueden contribuir a problemas cardiovasculares y cerebrovasculares, así como a padecimientos respiratorios.
Los niveles de otro contaminante importante, el dióxido de nitrógeno, asociado al asma y otros problemas respiratorios, son superiores a los recomendados por la OMS en el 77% de las ciudades que miden este tipo de contaminación.
“Después de sobrevivir a una pandemia, es inaceptable que todavía haya siete millones de muertes evitables y una cantidad incalculable de años de buena salud”, dijo la directora de Salud y Medio Ambiente de la OMS, la española María Neira.
El informe se publica tres días antes de la celebración del Día Mundial de la Salud, este jueves 7 de abril, que este año tiene como lema “Nuestro planeta, nuestra salud” y busca vincular la lucha contra el calentamiento global con los objetivos sanitarios de la OMS.